Si me preguntas a mí
Cuando veas esos papeles de oficina que hoy son una tarea a
cumplir, pensá que en el futuro los convertirás en innecesarios pero indispensables
mensajes de amor. En las hojas impresas siempre queda una cara libre, de la misma
forma que sucede con la vida. Lo que hoy es de una manera, mañana puede ser
distinto. O muy distinto.
Tené presente que cada día que vivimos, es un día que le
ganamos al mundo, que robamos sutilmente para nuestro placer personal.
(Si me preguntas a mí, te diría sin dudarlo que agotes todas
las posibilidades en intentar ser tu mejor versión. Si estás abierto a escuchar,
las instrucciones para conseguirlo vendrán por sí solas.)